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Visita a los campamentos de las haciendas Furukawa

31/07/2021

El día de ayer se realizó una visita a tres campamentos de las haciendas Furukawa, en la vía Santo Domingo –Quevedo ubicados entre los kilómetros 42 y 37. La Comisión de los Derechos Humanos de la Asamblea Nacional, encabezado por los asambleístas, Grúber Zambrano, Paola Castillo y Jhonny Tapia constataron las condiciones deplorables en las que viven las familias de los extrabajadores de esta empresa, quiénes lograron que su caso sea reconocido como esclavitud moderna. También estuvieron funcionarios de la Fiscalía, MIES, Defensoría del Pueblo y las instituciones que velan por los derechos de las personas que trabajaron en este lugar.

EL objetivo de la visita fue recopilar testimonios de las familias para avanzar en un informe que elevará la Comisión de legisladores para el seguimiento del proceso de fiscalización, que empezó el 16 de abril de 2019.

En este sentido, desde el pasado 21 de julio, este cuerpo legislativo retomó los pedidos de comparecencia de las autoridades de los ministerios de Salud, Inclusión Social, Trabajo, Agricultura y Ganadería; además, de la Defensoría del Pueblo, Derechos Humanos, entre otros, para dar seguimiento al caso.

En un informe difundido por la Comisión Legislativa, previo a la visita en Santo Domingo, se recordó la forma judicializada bajo la cual ha venido actuando la abacalera. “La empresa, por años, ha implementado un sistema de vida y trabajo de familias dentro de sus haciendas que, por las condiciones en que se realiza, se adecuaría a un sistema de servidumbre prohibido por estándares internacionales y que vulneraría gravemente el conjunto de sus derechos humanos”.

En un medio televisivo local, Adrián Herrera, gerente de Furukawa, empresa dedicada al cultivo de abacá, desmintió todas las acusaciones que se han hecho en contra de la empresa y aseguró que todos los contratos de los trabajadores están al día y amparados bajo el respectivo seguro social, que tienen un médico ocupacional que se encarga de velar por la salud de los obreros, y actualmente hay 800 hectáreas invadidas por las personas que permanecen allí.

El 19 de abril de 2021, el juez Carlos Vera Cedeño emitió la sentencia por escrito en la que se determinó que en la empresa Furukawa Plantaciones C.A. existió servidumbre de la gleba en los campos de abacá.